ENTREVISTA AL PINTOR ANTONIO BELDA
“Belldianismo es mi compromiso personal de expresar el arte siendo exigente, perfeccionista y honesto”
PREGUNTA.- Le felicito por la buena acogida que tienen sus obras, que desde 01 de abril han estado expuestas en El Pianista del Carmen (Vélez-Málaga). Exposición denominada Belldianismo. Reencuentro con Vélez-Málaga. Hábleme usted del belldianismo, y del sentimiento de reencuentro con su pueblo.
RESPUESTA.- Belldianismo es mi compromiso personal de expresar el arte, que me implica ser exigente, perfeccionista y honesto con mi trabajo creativo, que me conduce a ser autocrítico. Esta actitud conlleva una búsqueda constante de lo humano, de su historia y de sus raíces culturales, para plasmarlo en mis obras. Que implica que la humanidad sea protagonista de su propia existencia; para bien o para mal. El reencuentro con Vélez es un deseo de volver a encontrarme con mis raíces, con los compañeros pintores, con mi pueblo y con la luz de nuestra tierra.
P.- En su juventud fue alumno del pintor Francisco Hernández pero, a diferencia de otros alumnos que han reflejado en sus obras el estilo pictórico del maestro, usted mantuvo su identidad personal. Me gustaría que expresase lo que aprendió de él. ¿Qué características técnicas y tendencias pictóricas compartieron?
R.- Yo admiraba Francisco Hernández por su capacidad para expresar el dibujo, que lo dominaba con excelencia. Era generoso en compartir su saber y fue mi referente, para que yo afianzase el dibujo. Compartía con él ese buen hacer artístico y ese amor por los pintores renacentistas. Además, aprendí de él el compromiso de ser artista. Porque por sus obras ha demostrado que él era un gran creador; por lo tanto, un ejemplo a seguir.
P.- Haciendo una mirada retrospectiva en sus obras. ¿Qué evolución ha habido en su pintura, en cuanto a la creatividad, a la técnica, a los temas tratados?
R.- Desde mi juventud ha habido una constante en mi creatividad, y ha sido mi admiración por los autores renacentistas, a quienes he tenido siempre como referentes. De ellos he admirado la técnica empleada del dibujo y del colorido, e incluso la concepción humanista que aporta el Renacimiento. En Madrid he trabajado como copista del Museo del Prado, ello ha sido enriquecedor para adquirir madurez. Pintar un Zurbarán, por ejemplo, era un reto; suponía mantener un diálogo con las obras y los pintores del Prado. Pero, en cuanto a la temática, más que una evolución he realizado un estudio de la historia y de las culturas, eso es lo que aporto en mis obras. Lo que ha evolucionado ha sido mi trabajo realizado, porque me he exigido siempre mucho.
P.- Como usted me expresa, recurre a la mitología, a la historia, a la religión... En sus obras vemos reflejadas ese cúmulo de culturas: tartésica, ibera, greco-romana, árabe..., que conforman nuestro acervo cultural. Hábleme de esa simbiosis cultural. También de la presencia floral como una constante en sus obras.
R.- La presencia floral es la manifestación de nuestro ancestro cultural ibero, que está presente en nuestro inconsciente genético, que vemos en la danza verdial, la cual ha trascendido en el tiempo. La mitología y la historia confluyen en las culturas para conformar esa simbiosis. Que es mi búsqueda de los orígenes, a la vez que es ese belldianismo del que he hablado, donde recreo e invento historias con los personajes. Y tengo, ahora, una preocupación de confrontar el acervo cultural con la realidad histórica actual.
P.- Dice usted que el arte como concepto es difícil de definir, porque es libre y abierto. Entonces, cómo vive usted el acto creativo?
R.- Todo acto creativo es enfrentarse con preguntas con la necesidad de desvelar verdades que duelen o den satisfacciones, y ello supone sentir dudas, temores, angustia ante el lienzo en blanco. Ejemplos son los fetiches que aparecen e ignoro qué son y que me inquietan. Porque yo me considero en mi trabajo creativo un renacentista, que hace surrealismo. Pero queriendo trasmitir y reivindicar el humanismo.
P.- Después de tantos años de ausencia, al parecer usted nunca se ha ido. Porque en su obra está muy presente la luminosidad de su tierra. Hábleme de esa luz y de su lenguaje como manifestación creativa.
R.- La luz iberotartésica está en nuestro ADN, y es lo primero que aparece y resalta en las obras. Hay un lenguaje en el colorido de las obras, que provoca ese diálogo con el espectador.
P.- ¿Qué les quiere decir a sus paisanos? ¿Qué proyectos tiene por realizar?
R.- Que siempre han estado en mi corazón, soy veleño y siento a Vélez y me preocupo por sus temas. Que procuraré estar a la altura de las circunstancias, para lo que me requieran. Proyectos: seguir exponiendo. También crear un taller de pintura para aprendizaje de la nueva generación de pintores.