El Teatro Cervantes acogerá el espectáculo de danza contemporánea coreana: Bow+ No Comment
El evento corre a cargo de la compañía surcoreana K-Arts Dance Company, y se celebrará en el marco del Ciclo Danza Málaga 2019, el domingo 17 de noviembre a las 19 h en el Teatro Cervantes de Málaga
Dicho espectáculo se celebra en el marco del primer festival de danza contemporánea de Corea en España, Chum Danza, organizado por el Centro Cultural Coreano, el cual apuesta por la innovación y presenta las mejores compañías surcoreanas.
En el espectáculo del 17 de noviembre, Jeon Misook, una de las coreógrafas más prestigiosas de Corea, presenta junto a su compañía K-Arts Dance Company, cuyos miembros son destacados bailarines estudiantes en la Universidad Nacional de Arte de Corea, los espectáculos 'Bow' y 'No Comment', ésta última del coreógrafo SHIN Chang-ho, movimiento en estado puro que refleja la tradición cultural de corea.
'Bow' es un trabajo que hace referencia al acto de inclinarse, un gesto de bienvenida, una reverencia y a su vez un acto de belleza que demuestra cortesía y respeto. Asimismo, refleja la posición social a través del ángulo del arco el cual cobra un papel esencial. En un ejercicio de deconstrucción, los bailarines reiteran el ritual convirtiéndolo en una pesada carga, y, por consiguiente, haciendo cuestionar su razón de ser. Es una obra que se despega en un espacio y movimientos minimalistas que ayudan al público a centrarse en los movimientos del cuerpo.
'No comment' es a veces la manera de cómo la verdad se cuenta. Como el pulso calmado o el golpe de sangre que sacude el cuerpo, la verdad es la lucha hacia la realidad. Comienza con un movimiento sencillo, pero intrigante, y permite a los bailarines que desarrollen la investigación silenciosa acerca de la esencia de la vida llena de energía e instinto. Shin Chang-ho es el coreógrafo de esta famosa pieza de Laboratory Dance Project en Corea.
Concluye en una serie de saltos deportivos y mortales, bailarines que golpean sus cuerpos a un ritmo hipnótico terminando en un clímax impresionante. Una coreografía realmente ambiciosa con movimientos envueltos en música. Aunque al comienzo de la actuación es difícil adivinar la relación entre dos bailarines, poco a poco se hace evidente que uno de ellos es libre de moverse, el cual se infringe un autocastigo que continua sin aparente fin.