La Junta convoca ayudas de casi 490.000 euros para fomentar la digitalización en pymes turísticas malagueñas
Con estas subvenciones se persigue mejorar la competitividad de las empresas del sector y crear nuevos productos que permitan acabar con la estacionalidad
El Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) ha publicado la convocatoria para la concesión de subvenciones, en régimen de concurrencia competitiva, dirigidas al fomento de la implantación de las tecnologías de la información y la comunicación en las pymes turísticas de Andalucía.
Esta nueva línea de ayudas contará con una inversión de casi 2,4 millones en dos anualidades (1.190.000 euros cada año) y permitirá financiar hasta un 100% de cada gasto subvencionable, siendo el máximo de cada proyecto de 15.000 euros. Para la provincia de Málaga está prevista una partida de 489.917 euros que se invertirán, igualmente, en dos años (2020 y 2021).
El plazo de presentación de solicitudes es de un mes desde el día siguiente a su publicación en BOJA. Debido al número de solicitudes que se prevé tramitar en cada una de las convocatorias, así como a la complejidad de las mismas, se ha establecido un plazo máximo para resolver el procedimiento de concesión de las subvenciones de seis meses.
“La crisis sanitaria provocada por el COVID ha puesto de manifiesto la importancia de incorporar las nuevas tecnologías al día a día y en el sector turístico ofrecen un gran potencial para impulsar una actividad que ha sufrido especialmente las consecuencias de la pandemia”, ha destacado la delegada territorial de Turismo en Málaga, Nuria Rodríguez, quien se ha confiado en que los empresarios turísticos malagueños “demuestren una vez más su carácter emprendedor y siempre abierto a innovar para mejorar su oferta”.
Esta nueva línea de subvenciones se dirige a todas las microempresas, pymes y empresas de trabajo autónomo turísticas radicadas en los municipios de Andalucía, excepto las que se encuentren en aquellos considerados Destinos Turísticos Maduros del Litoral Andaluz, para los que ya existen unas específicas desde 2018.
Las bases reguladoras, que se aprobaron el pasado mes de junio, han establecido unos criterios para valorar las solicitudes presentadas. Entre ellos destacan el lugar del emplazamiento del proyecto, la población del municipio, las certificaciones y distintivos de calidad de la entidad solicitante, las condiciones socio-laborales de las personas empleadas, su contribución a la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, o la apuesta del proyecto a la mejora de la accesibilidad universal del destino, la diversificación y la desestacionalización de la oferta y la demanda, así como el carácter innovador del mismo.