Desde el pasado domingo 13 de enero, España entera ha aguardado un desenlace de la tragedia entre la resignación y la esperanza. Finalmente a la 1.25 h., en la madrugada del sábado, se ha podido rescatar por fin el cuerpo del pequeño Julen, pero ya sin vida.

La Brigada de Salvamento Minero pudo abrir la galería del pozo paralelo por donde un agente de la Guardia Civil pudo culminar el trabajo en el que han participado más de 300 personas.

Por la mañana, el delegado del Gobierno en Andalucía, Alfonso Rodríguez de Celis, ha confirmado que "la posición del cuerpo determina que la caída libre de Julen llegó hasta unos 71 metros, y que ahí se topó con un suelo de tierra. El pozo a partir de esa cota estaba lleno de tierra. Por encima de Julen, también había tierra".

Ahora será el Juzgado de Instrucción número 9 de Málaga la que se encargue de la investigación.