Poco antes de las 23.00 horas del miércoles, se ha sentido en algunas zonas de la comarca de la Axarquía un ligero temblor que ha puesto en alerta a unos ciudadanos que aún siguen confinados por otra alerta, la sanitaria.

El movimiento sísmico ha tenido una magnitud de 3,6 y su epicentro se ha localizado en la cercana Alhama de Granada, aunque en un principio se puso el foco en Ventas de Zafarraya.

Este tipo de movimientos sísmicos, encuadrados en la categoría IV de la escala macrosísmica del propio IGN, se caracterizan por hacerse notar en el interior de los edificios (mucho más al haber más gente dentro por el confinamiento) en forma de objetos que se mueven o lámparas que oscilan sin causa aparente, aunque no suele dejar a su paso pérdidas materiales de importancia o daños a la población.