Primeros cortes de agua para riego
Editorial del periódico NOTICIAS 24
Unos prometieron trasvases de agua; otros, planes hidrológicos; otros, desaladoras... Prácticamente todos los políticos que pasaron por la Axarquía en la pasada racha de elecciones de todo tipo que se vivió en España, prometieron agua para la comarca. Es inconcebible, venían a decir, que la única tierra con la capacidad de cultivar frutos subtropicales en todo el país, no pueda hacerlo por falta de agua.
En la Axarquía, todo el que ha podido (y puede) sembrar árboles tropicales por debajo de la cota del pantano de La Viñuela, lo ha hecho. Es lógico. Si el clima y el suelo lo permiten, ¿por qué no cambiar el tradicional secano de almendros, olivos o vides, por un producto tan rentable como mangos, aguacates y otros frutos similares?
Sin embargo, la realidad dicta otra cosa: no hay agua para todos..., ni la va a haber a corto plazo sino lo remedia la propia naturaleza. Los ecologistas califican de ‘burbuja’ la proliferación de cultivos tropicales, y este adjetivo se basa, de nuevo, en que no hay agua para todos. ¿Se ha pensado qué pasará con esas plantaciones si el pantano sigue en mínimos?
Es cierto que la Junta está buscando alternativas y proponiendo soluciones que palien la escasez natural de lluvias, pero hay que mirar mucho más lejos y con más elevadas pretensiones. ¿Queremos que la Axarquía aproveche su clima único para ser una potencia mundial de frutos tropicales? ¿Se puede solucionar definitivamente la falta de agua? ¿Con qué ojos miramos estos cultivos: como suplantadora de los tradicionales de secano o como una oportunidad de empleo y riqueza?
Ya es hora de cerrar este tema. Manos a la obra.