El tren hacia Nerja
La inauguración del tren suburbano de Málaga a Vélez-Málaga se produjo en 1908. Y es bien sabido que existía el proyecto de, a través de Ventas de Zafarraya, continuarlo hasta Granada. Pero resulta menos conocido que la empresa adjudicataria proyectaba, también, crecer hacia Almería.
El trazado del ferrocarril estratégico desde Torre del Mar a Maro quedó recogido en un plano inicial que es firmado por el ingeniero de caminos don Leopoldo Werner con fecha 12 de mayo de 1908, a escala de 1:100.000. Y el mismo año, a finales, ya se presenta el plano correspondiente al tramo Maro-Motril, firmado por el comandante de ingenieros don Juan Maury y Uribe en fecha del 4 de diciembre del citado mismo año de 1908. Algarrobo, Torrox, Nerja, Maro, La Herradura, Almuñécar, Salobreña... iban a tener su enlace ferroviario.
El estudio de este ferrocarril estratégico, de vía ancho de un metro, desde Torre del Mar a Maro, por Torrox y Nerja, fue autorizado por Real Orden de 14 de marzo de 1908. El acta de fijación de las condiciones a las que había de sujetarse el referido estudio nos informa de notabilísimas noticias sobre los pormenores del proyecto.
El día 21 de abril del mismo año, se trasladaron los técnicos a Torre del Mar, como punto de partida, para el reconocimiento in situ. Por aquel entonces, se encontraba en construcción el ramal Torre del Mar a Vélez-Málaga, que se pondría en uso aquel mismo verano.
Tras minuciosos estudios y tanteos, se acuerda la elaboración de los planos básicos, firmándose el acta de fijación de las condiciones el día 12 de mayo.
Una Real Orden del 2 de abril había ya autorizado el estudio y fijación de condiciones para la extensión de la línea desde Maro a Motril, pasando por la Herradura, Almuñécar y Salobreña.
Toda la documentación correspondiente a cuanto decimos, se halla en la actualidad en el Archivo General Militar de Segovia, 3ª sección, 3ª división, legajo 858.
Y mientras que las aspiraciones de continuar el trazado ferroviario de Vélez-Málaga a Granada, se quedó detenido tras el tramo Vélez-Ventas de Zafarraya, el trazado hacia Almería quedó en solo proyecto. No se llegó a ejecutar parte alguna, a pesar de que los estudios se llevaron a cabo con diligencia y culminaron correctamente.
Es difícil saber los beneficios que habría reportado a la Axarquía la ejecución de lo que se había previsto; pero es fácil suponer que los frutos desarrollistas habrían sido ingentes dado que el mencionado medio de transporte habría sido vital para el traslado de personas, mercancías, capitales e ideas.
Del mismo modo que la inauguración, en enero de 1908, del mencionado tramo Málaga-Torre del Mar, y, en julio, del tramo Torre del Mar-Vélez supusieron un cambio radical en la economía y mentalidades, si el tren hubiese continuado hasta Nerja, los beneficios resultantes habrían sido cuantiosos.
Cuando hoy se aspira a un tren litoral que uniera la zona oriental de la provincia con la capital, bueno es que sepamos que hubo un día, hace un siglo, que la idea estaba elaborada y había calado en los responsables públicos y privados.
Y, aunque resulte sorprendente, estuvo a punto de convertirse en una realidad.