Lo que acontece en la vida
La vida está llena de acontecimientos. Cuando hablamos de la vida, podemos hacerlo de manera general, o bien pensar en el ‘individuo’, hablar de ese ‘ser’ que existe y está obligado a vivir. Que debe desarrollarse como ‘persona’; para lograrlo, tiene que vivir en sociedad.
La vida humana es un periodo breve de tiempo. Que, además de ser breve, se tiene que vivir en etapas de crecimiento: la niñez, la juventud, ser hombre, ser mujer, y llegar a la vejez como un premio de un camino andado; alcanzando la serenidad del espíritu, la templanza del cuerpo. Esto se alcanza, si la vida te da la oportunidad de vivir el periodo completamente.
Un compañero me sugería que escribiese sobre los problemas de la sociedad, convertir mi columna en un espejo de ella. Muy buen consejo, que tengo presente. Pero le contesté que mi preocupación era lo humano y, por lo tanto, mover su conciencia. Porque si verdaderamente queremos un modelo de sociedad democrática donde lo primordial sea que se logre la convivencia y el entendimiento, para conseguirlo es imprescindible formar ‘personas’. ‘Ser persona’, como lo expresa nuestra pensadora María Zambrano, implica estar dotado de conciencia y adquirir la capacidad de pensar en libertad. Vivir humanamente aceptando los valores, esencialmente, humanos.
Vivimos en un mundo globalizado donde la información es planetaria. Pero si ese exceso de información no se sabe discernir, distinguiendo lo autentico de lo falso o interesado, se convierte en desinformación con la única intención de manipular la acción de pensar. En esta tesitura hay siempre intereses económicos y sociopolíticos. Ejemplo de manipulación es, actualmente, oír las contradicciones sobre temas de salud, como en el caso de la pandemia del Covid- 19, en la cual se elaboran bulos intencionados, y aparecen los ‘negacionistas’. Lo observamos, no sólo en España, sino también a nivel global. Y, como digo, es muy triste que la opinión pública le dé más importancia a la salida de Messi del FC Barcelona, que a preocuparse por la salud y ser responsable. Esto ocurre porque se pierde la capacidad de pensar, ante la manipulación en la se cae, influenciado por los prejuicios e intereses partidistas.
Gracias, compañero, por tus sugerencias, las cuales, como he dicho, tengo presente. Sé lo importante que es formar ‘personas’ y hacerles sentir que tienen conciencia; razón para que hagamos uso de la facultad de pensar y actuar humanamente.
Pero en el acontecer de la vida humana, no sólo están los problemas sociales cotidianos, los cuales hay que salvar con la buena convivencia. También están presentes las necesidades de la condición humana: ese anhelo de ‘ser’ y de ‘existir’, todo aquello que, verdaderamente, nos hace humanos.
Este vivir humanamente implica enfrentarse a los requisitos que delimitan la condición humana: nacer oscuramente, haber de morir, soportar, mientras dura, esta vida pasajera y su injusticia. Esta fue la queja de Job, la cual nace del fondo del corazón humano.
Como desea todo ser humano, quiero llegar “a la serenidad del espíritu, a la templanza del cuerpo. /
A ese instante de la contemplación última. / De la mirada cargada de miradas. La sabiduría de un tiempo. / La vejez como premio de un camino andado/ buscando las entrañas del océano. / Retorno al origen de la naturaleza perdida”.