A la buena memoria
En medio de este gran silencio extraño
mayo ha florecido,
y es que por suerte no entiende el campo,
de los problemas que hemos tenido.
La soledad impuesta en estos días
y la distancia de más de un metro,
terminarán muy pronto con la alegría
de los abrazos en cada encuentro.
No será, como en años anteriores
que todo terminaba en una fiesta,
de todos los recuerdos los mejores.
Hoy gozabuena salud la tierra
más, nunca podrá olvidarse España
de aquellos españoles que le faltan.
Antes que otra vez se pare el tiempo,
y lo que importa sea lo primero,
y el hogar que hasta ayer era tu casa
mañana se convierta en una celda;
antes que la naturaleza en calma
descargue sobre el mundo otra tormenta
de miedo y sin sentido;
antes que termine en el olvido
lo que hemos aprendido en las ventanas;
antes que, a la piedra, el oro que reluce
le reste su importancia,
Señor, no puedo olvidar aunque quisiera
el grito de la tierra malherida.
Mi corazón espera
poder disfrutar todos los días,
lo que aprendimos en la cuarentena.