Frigiliana

Poema de Luisa Ruiz

Los títulos tenemos que ganarlos
con méritos, poquito a poco 
y por derecho
y este, es uno de los pueblos 
más bonitos
que tiene este título 
desde hace tiempo.
Por el blanco de sus casas,
la pulcritud de sus suelos,
por sus calles empedradas,
por su historia ysus recuerdos,
por su situación y su enclave,
por las culturas de agosto,
por la miel negra de caña
y su patrón San Antonio.

Porque la producción de su Ingenio
le da un sabor especial
a su gente, al paisaje
y a los platos del lugar,
y porque, desde arriba del peñón
se asoma al Mediterráneo
y desde ahí, entre la sierra y el mar
tiene un clima privilegiado.

Cuenta la historia hace siglos
que judíos, musulmanes y cristianos
vivieron en Frigiliana
como pueblos hermanados.
En el Barribarto del pueblo
aún se pueden ver las huellas
y la sangre de esas culturas
aún corre hoy por sus venas.
Lo dice el agua que brota
por boca de los tres caños
y que al caer fluye unida
por la pileta de mármol.

Después, con el paso de los años
las culturas se volvieron a encontrar
y hoy: la cruz, la luna y la estrella
siguen juntas en la fuente de la entrá.
Este bien estuvo siempre presente
en las fuentes, en los pozos,
en los campos, en sus frutos
y en su apodo de “Aguanosos”
y yo me siento orgullosa
por compartir esos genes,
porque recargo las pilas
cuando me pierdo en sus calles,
porque cada vez que lo visito
voy descubriendo detalles
que hacen de Frigiliana
un destino inolvidable.
Que es el pueblo más bonito
que no me lo discuta nadie.