Necesito sentir esa alegría, que se contagia
al escuchar las notas de la música
que forman al caer las gotas de la lluvia
y al pisar la hierba fresca con escarcha.

Necesito revivir en mi memoria
sensaciones por momentos olvidadas,
como aquel olor de la tierra bien mojada
que hoy forman parte de la historia.

No se cómo acabar con tu agonía.
No se cómo cantar a lo que importa.
¡Son incontables los beneficios que reporta!
El agua es el mayor milagro de la vida.

Queremos disfrutar de nuestro sol,
escuchar lo que nos va a decir la tierra,
sentir el abrazo maternal de la ribera
y ver los colores a su paso deja en cada flor.

Necesito comprobar que siguen vivos
los olores y sabores de mi tierra,
necesito disfrutar del agua fresca
y despertar con ella los sentidos.

Hace falta pintar de colores nuestros campos,
compartir el tesoro de esta tierra,
disfrutar de los verdes de la sierra 
y del sabor especial de nuestros platos.

Hace falta que cobren vida a las raíces,
y dar gracias al cielo cual la yedra,
ver las huellas de su paso en cada piedra,
y luego, cantar con mi verso los matices.
La salud, la paz y el agua son, que no se nos olvide,
lo más importantes que hay hoy sobre la tierra.