TORRE DEL MAR
Atencia propone el nombre de la bailaora Rocío Molina para el futuro teatro de Torre del Mar
La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Vélez-Malaga ha aprobado este lunes la propuesta del teniente de alcalde de Torre del Mar y portavoz del Grupo Independiente Pro Municipio de Torre del Mar (GIPMTM), Jesús Pérez Atencia, en la que solicitaba el inicio del expediente para la denominación del futuro Teatro de Torre del Mar con el nombre de la bailaora y coreógrafa Rocío Molina, Premio Nacional de Danza en el año 2010.
La propuesta de Pérez Atencia atiende al proyecto de teatro "puesto en marcha para nuestro pueblo, de gran acogida y apoyo entre todos los vecinos y vecinas, y que viene a llenar el vacío existente en materia cultural". En este sentido, el teniente de alcalde de Torre del Mar entiende que "para darle la relevancia que merece y al mismo tiempo realizar un reconocimiento público y expreso a la persona de la ilustre bailaora y coreógrafa torreña, sería interesante que el futuro teatro llevara su nombre”.
Según continúa Atencia, "hablar de Rocío Molina es hablar de una artista y creadora de indudable proyección nacional e internacional, y que entendemos debe tener el reconocimiento que se merece y le corresponde en su tierra. Por ello, que mejor manera de hacerlo, que dándole su nombre a un espacio para la cultura que va a quedar en el pueblo de Torre del Mar para las siguientes generaciones".
LA ARTISTA
Hay que recordar que la bailaora Rocío Molina ha logrado acuñar un lenguaje propio cimentado en la tradición reinventada de un flamenco que respeta sus esencias y se abraza a las vanguardias. Radicalmente libre, aúna en sus piezas el virtuosismo técnico, la investigación contemporánea y el riesgo conceptual. Sin miedo a tejer alianzas con otras disciplinas y artistas, sus coreografías son acontecimientos escénicos singulares que se nutren de ideas y formas culturales que abarcan desde el cine a la literatura, pasando por la filosofía y la pintura.
Bailarina inquieta, Rocío Molina nace en Torre del Mar (Málaga) en 1984. Empieza a bailar a los tres años, con siete esboza sus primeras coreografías, a los diecisiete se gradúa en el Real Conservatorio de Danza de Madrid con matrícula de honor y entra a formar parte del elenco de compañías profesionales con gira internacional.
Tiene veintiséis años cuando el Ministerio de Cultura le otorga el Premio Nacional de Danza por “su aportación a la renovación del arte flamenco y su versatilidad y fuerza como intérprete capaz de manejar con libertad y valentía los más diversos registros”.