La listeriosis es una enfermedad cuyo tratamiento resulta eficaz y que sólo puede llegar a ser preocupante en el caso de las personas que pertenecen a alguno de los grupos de riesgo, que están perfectamente identificados: personas de edas extremas (bebés y personas de edad avanzada), enfermos crónicos y personas con inmunodepresión, y en el caso de las mujeres embarazadas, por su especial tropismo a causa del feto.

El doctor José Miguel Cisneros, portavoz de la Consejería de Salud y Familias por el brote de listeriosis, ha hecho este martes un llamamiento a la tranquilidad de la población, insistiendo en que sólo las personas que hayan consumido el producto contaminado (en este caso la carne mechada de la marca "La Mechá") pueden contraer la enfermedad. Quien no lo haya consumido, puede estar completamente tranquilo de que no ha contraído la enfermedad, aunque pueda tener algunos de sus síntomas, como la gastroenteritis, cuya causa será otra diferente a la infección por la listeria.

Para el grueso de la población, ha asegurado el doctor Cisneros, las personas que no pertenecen a los grupos de riesgo, la enfermedad cursará sin síntomas o con una gastroenteritis de carácter leve, que se curará en poco tiempo. Si en algún caso presenta fiebre, el protocolo establece que se realicen hemocultivos y, en caso de resultar positivos, se prescriba un tratamiento antibiótico. Si los síntomas los presenta una persona perteneciente a algún grupo de riesgo, el tratamiento se establece desde el primer momento.

El doctor José Miguel Cisneros ha insistido en que el tratamiento contra la listeriosis es eficaz y cura la infección. Pero también ha advertido que, cuanto antes se diagnostique, antes se cura y más eficaz es. Por ello ha instado a las personas pertenecientes a los grupos de riesgo que hayan consumido el producto a acudir a su médico de inmediato al más mínimo síntoma.

El portavoz de la Consejería de Salud y Familias por el brote de listeriosis ha explicado que cada año se producen unas 300 infecciones por listeria en España. En este caso, al encontrarnos ante un brote, aunque la incidencia pueda ser mayor, resulta mucho más fácil detectar los casos, informar a la población de riesgo de cómo actuar y combatir la enfermedad con más eficacia.