El pasado 7 de enero, AGS, gerente de un taller de Glassdrive en la localidad de Torre del Mar, denunciaba a la multinacional francesa por la presunta falsificación de 31 firmas en un contrato.

Según la denuncia, la referida falsificación tenía como finalidad alterar la fecha del contrato entre Glassdrive y su entonces asociado AGS, a fin de eximirse de toda responsabilidad por los incumplimientos de los acuerdos, además de reservarse el derecho de interponer una demanda contra AGS por incumplimiento de contrato.

La denuncia de AGS fue admitida a trámite por un juzgado de Alcorcón (Madrid), en el que hoy viernes 12 de noviembre, como recoge el portal especializado Infoluna.com declaran como imputados tanto Gabriel Palá, director financiero de la multinacional francesa en la época de ese contrato, y la propia Glassdrive España.