La avenida Esperanto de Torrox Costa se ha inundado del espíritu germano entre el 22 y el 25 de septiembre, con motivo de la celebración del Oktoberfest que para esta octava edición, y tras la gran participación en años anteriores, habían ampliado tanto la zona de restauración como de mesas y sillas que han estado continuamente llenas, con un gran flujo de asistentes desde la apertura a mediodía hasta el cierre ya entrada la madrugada.

El alcalde de Torrox, Óscar Medina, junto al cónsul de la república Federal de Alemania en Málaga, Arnulf Braun, y la concejala de Comercio, Sandra Extremera, fueron los encargados del O'zapft is! con el que arrancaba la presente edición el pasado jueves por la noche.

La cerveza, sin duda, ha sido la protagonista, acompañada por la gastronomía típica como son las salchichas o el codillo, pero también ha tenido un gran peso el buen ambiente y las ganas de disfrutar de todos los asistentes, no solo alemanes, residentes o vecinos de otras localidades, sino también de público nacional entre los que cada vez está más interiorizada esta fiesta.

La pequeña Alemania del sur de Europa ha sido la perfecta anfitriona para estos días de fiesta en los que la oferta musical también se ha ampliado, para amenizar estas jornadas en las que,  ante la previsión de que se iban a mantener las altas temperaturas, previsiblemente se habían instalado una carpa que ha sido muy bien recibida entre los asistentes que han podido cobijarse a su sombra.

El regidor torroxeño ha mostrado su satisfacción por el buen desarrollo de la fiesta y ha avanzado que ya se encuentran preparando la siguiente con la intención, como siempre, de “mejorarla y hacerla cada año más grande”.