Tensionar la sociedad

Editorial de Noticias 24

Todos , creemos, somos conscientes de que una cosa es la palabra de un político en la oposición, y otra cuando llega al poder. Hay miles de casos con los que se podría ilustrar esta afirmación, pero un caso sangrante que ha terminado por soliviantar a la población es el precio, a todas luces desproporcionado, que ha alcanzado el consumo eléctrico.

Cuando se acuñó el término ‘pobreza energética’, muchos se sumaron con entusiasmo a enarbolar la bandera de la defensa de los pobres ciudadanos que tenían que poner el ventilador en verano o la estufa en invierno. Ahora, por el contrario, vemos al propio Gobierno -no olvidemos que un elevado tanto por ciento de la factura eléctrica son impuestos- y a sus medios afines dar consejos para ahorrar electricidad, algunos tan surrealistas como planchar de madrugada cuando es más barato el consumo. Incluso la propia Endesa, con beneficios multimillonarios, nos aconseja “para ahorrar” hacer los huevos escalfados en vez de fritos, lo que ya trasciende el consejo para convertirse en burla.

Así, cada día le aparece una nueva batalla al ciudadano en forma de problemas reales, mientras que se inventan otros para “tensionar a la sociedad”.