Rompiendo silencios
El Miércoles Santo tendrá lugar en la iglesia de Ntra. Sra. de la Asunción de Cómpeta la I Exaltación de la Saeta. La artista invitada será la cantaora flamenca Virginia Gámez, que tiene raíces competeñas y una peña flamenca con su nombre en el pueblo. Su arte está reconocido dentro y fuera de España. El acto será presentado por la colaboradora de Noticias 24, Luisa Ruiz.
Yo, no puedo desde un balcón
agarrándome a una reja,
alzar al cielo mi voz
pa’ cantar una saeta.
Pero sí puso el Señor
la poesía en mis venas
para con mi verso y mi pluma
alabar tanta grandeza.
Quien te bautizó saeta
no tuvo mejor acierto:
Es dardo de voz quebrada,
escalofrío hecho verso,
el llanto desconsolado
de una madre rota en duelo,
es, la música sagrada
en boca del saetero,
la mano del vestidor
frunciendo los terciopelos
verdad que sale del alma
ante el Jesús del madero.
Un lamento, una agonía,
una bocaná de incienso.
Es un abrazo al Señor
en su agonizar eterno,
ruego, adoración, plegaria,
es la emoción andaluza
que hasta cuando llora, canta.
No se equivocó San Agustín
en su célebre proverbio:
“Quien canta reza dos veces”
hoy vamos a saber que es cierto,
pues, mientras Virginia canta
hasta romper los silencios,
y mientras aprieta los puños
sacando el último aliento,
no hay quien oyendo esa voz
este más cerca del cielo.
Ya es primavera otra vez.
Ya huele a Semana Santa.
Ya nos envuelve su aroma.
No hacen falta más palabras.
Pero, ¡Qué suerte! poder oír
esa bendita garganta
de quien canta como nadie
a nuestra Semana Santa.
¡Cómo acelera los pulsos!
¡Cómo nos lleva en volandas!
Su voz, pone el corazón a mil
y los pelos como escarpias.
Desde que nació Virginia
en vez de dormir con nanas,
se dormía con flamenco
y con flamenco despertaba,
y ese don que Dios le dio
le fue marcando la vida
pues con solo 13 años
fue finalista en Las Minas.
De momento la más joven
y lo lleva muy a gala
y con 20 años cantó 4 horas
sola con una guitarra.
Ese arte es reconocido
incluso fuera de España
y hoy tenemos la gran suerte
de tenerla en nuestra casa.
Sus raíces son de aquí,
aunque nació malagueña,
hoy tiene su nombre escrito
en la puerta de su peña.
Competeña o boquerona
es, orgullo de Andalucía,
cada cual defienda su tierra
que yo defiendo la mía.
Y puesto que la saeta
es una oración sentida
de los que rezan a Cristo
y los dolores de María
hoy, vamos a rezar cantando
en los labios de Virginia.