Urge limpiar la haza

Reflexión de Miguel Ángel Sánchez, portavoz de IU en Vélez-Málaga

Cuando uno ha llorado, literalmente, en el pasillo de un Rectorado porque aquel maravilloso gobierno subió un poco los requisitos para la obtención de beca y te dejó a media décima de la tu­ya... que era clave para continuar estudiando; cuando has rociado estiércol en verano y pasado frío en la escarcha del invierno, trabajando con tu madre y tus hermanos en el campo para poder culminar tus estudios; cuando has asistido a clase, te has preparado concienzudamente tus asignaturas, incluso muchos de tus compañeros han fotocopiado tus maravillosos apuntes en reprografía... y de repente, ¡zas!: un nuevo ingreso hospitalario en la familia te impedía presentarte a los exámenes en aquella convocatoria. 

En definitiva, cuando uno y su gente se ha sacrificado tanto para llegar a la meta, esta historia de másteres todo a cien... estos Casados-Cifuentes del montón en la Rey Juan Carlos I, estos privilegiados del tocomocho y la picaresca patria, te hacen sentir to­­­davía más orgulloso de tus orígenes, del esfuerzo extra del provinciano por el que nadie daba un duro en algunos momentos y de los valores en los que te has criado. 
Pero también te sientes muy asqueado por cómo están desacreditando el sistema universitario, al que tanto esfuerzo nos costó llegar a muchas hijos de trabajadores. 

Por no hablar ya del descrédito que están imprimiendo a la política. 

Urge limpiar la haza. 

Cada uno la suya.