No hay en el mundo nada

Poema de Luisa Ruiz
El infinito y el mar
una línea los separa.
Hoy el mar se desdibuja 
delante de mi ventana.
Los tres cuartos del planeta
vuelven a cobrar sentido,
parece que van y vienen
pero el mar siempre es el mismo.
El mismo cielo refleja
su color tan especial,
la misma costa le frena
sus deseos de avanzar.
Hoy con el viento de poniente
y los vaivenes del agua
poco a poco va ganando
centímetros a la playa.
Se va acercando despacio,
tímido hasta mi atalaya
y van quedando sus huellas
en las arenas mojadas.
De noche, esa inmensa soledad
brilla como si fuera de plata
y cuando se pone el sol,
el mar se enamora y baila,
y baila la arena y la sal
bailan la brisa y el agua
bailan, 
las espumas con mis huellas
y las olas con mi alma.
Y pienso cerrando los ojos
que no hay en el mundo nada
que se pueda comparar
a los vaivenes del agua,
a andar descalza en la arena,
y ver amanecer en la playa.