Las miradas de la vida
Amalia Mª Jiménez, autora de la novela La Escalera (como la vida), ahonda en la fortaleza y en las debilidades humanas, y lo hace con realismo.
Amalia Mª Jiménez, autora de la novela La Escalera (como la vida), ahonda en la fortaleza y en las debilidades humanas, y lo hace con realismo.
Yo he hecho el Camino de Santiago. Es una experiencia que no podré olvidar. Fue hace tres veranos, y volví convencido de que todo el mundo debería hacerlo alguna vez; de que, incluso, debería convencer a mis amigos para que, cuando pudieran, lo hiciesen.
La he visto muchas veces y siempre me sorprende, me fascina y me emociona más y más. La historia de una joven geisha con nombre de mariposa con- vertida en música, es un recreo para los sentidos.
La pobreza es siempre mal venida. No cae bien. A lo sumo, se la mira de soslayo, se pasa rápido por su lado o se le deja caer alguna migaja: las sobras del banquete.
Sabido es de las promesas que hacen aquellos que se aventuran en los laberintos del poder (o viven instalados en éste) y que rara vez pueden ser cumplidas.
He decidido hacer un máster en todología. Creo que tiene muchas salidas y, aunque hay una competencia feroz, un todólogo puede ejercer en casi todos los ámbitos de la sociedad y en cualquier entorno de la vida.
Cuando era un mozalbete y empezaba a hacer mis primeros pinitos laborales como disc-jockey en un gran hotel de la Costa del Sol, recuerdo cómo llegaban todos los veranos cientos de turistas que tenían la edad de mi abuela, pero que aparentaban otra cosa, lejos de la vida monótona y gris, del luto impenitente, del retiro vital, pensando más en esperar a la parca que en seguir disfrutando de la vida, sin ese control de la estructura familiar y social que el Estado y la Iglesia católica imponían a la sociedad española de entonces.
Francisco Gálvez, director de Noticias 24, avezado periodista y estudioso de la historia de la Axarquía con numerosos libros publicados, nos sorprende con una nueva obra: Los Velámenes del Vieux Port, donde elige una temática social y humana.
Los tiempos modernos han supuesto para el hombre muchas novedades. Una de ellas, la facilidad para viajar. Un viaje, sabemos, es más, mucho más, que ir de un lugar a otro, un desplazamiento, unas vacaciones…
“La palabra escrita me enseñó a escuchar la voz humana”, dice Marguerite Yourcenar en su Memorias de Adriano
Eso de la comida rápida, no lo entiendo. No me extraña que tenga sus seguidores, porque el mundo parece ir a paso de desfile rápido, con un reloj en la mano y contando los segundos que invierte en cada uno de sus movimientos. Vaya a ser que llegue tarde a no se sabe dónde.
Texto: Manuel Rivas
Ilustración: Susana Suniaga
Editorial Alianza
ISBN: 978-84-1148-076-5
15,95 €, (+ 7 años)
Tapa dura, 2022.
Está lloviendo (sigue siendo agua imaginada, a pesar de lo llovido). Pongo un vinilo sobre el tocadiscos y me arrebujo en el sofá, los ojos cerrados.
El pasado 20 de marzo se ha celebrado el Día Internacional de la Felicidad. Oír esta conmemoración en la radio, me provocó una sonrisa; sí, me pareció una nota agradable para empezar el día, pero, a la vez, me asaltaron un montón de dudas.
“Todos los hombres sois iguales”, “Siempre pasa lo mismo”, “Nunca estás contento”, “Jamás haré tal cosa”… Estas y otras frases parecidas las escuchamos con demasiada frecuencia.